No puedo más

Posted: 15 October, 2013 in Novedades, Pensamientos

Hola amigos/as! Hoy traigo un sencillo literario que me surgió ésta noche.

Luego del parate de casi 6 meses he decidido aparecer, porque de eso se trata, de aparecer y desaparecer como un mago…ja!

Pero ojalá pudieramos resolver todo con magia, sería todo más sencillo. Pero no, en lugar de eso poseemos el sexto sentido “FE” que es el regalo divino con el cual podemos hacer frente a nuestra más grande adversidades, con el cual podemos acallar nuestras dudas y silenciar nuestros temores.

“No puedo más” trata justamente de brindarnos una mirada opaca, una mirada trágica de una vida ajena, de una vida que no lucía bien en lo más mínimo. Quizás podamos preguntarnos ésta noche ¿puede decir un cristiano ¿no puedo más?”

Lean el siguiente texto y comentenme luego. Un saludo!

 

Estando solos, descubrimos que no estamos solos. D.M

“No puedo más”…
Era un comentario solitario que se perdía con el viento que asolaba la playa aquella tarde.
Eso es lo que se le escapó a Tiago.
Nadie lo escuchó. Estaba solo. Más solo que nunca.
Una lágrima se dejo entrever en sus ojos. Pero fue una sola. Como si estuviese luchando para retenerlas. A decir verdad, siempre evitaba cualquier signo de debilidad.

Certeza. Convicción.

Todo marchaba bien en aquel extraño otoño. Padres, hermanos, iglesia, todos unidos. La unión hace la fuerza.
¿Sin adversidades? ¿Sin problemas? Por supuesto que no.
Estaban ahí solo para recordarles que tan humanos son, que tan débiles o tan fuerte podían ser.

“No puedo más”

¿Qué fue lo que pasó? Le sorprendió la jugada del destino. ¿Era gol?, ¿estaba off-side? ¿Había valido tanta corrida?

Conexión. Prontitud.

Un suspiro de sinsabor.

No todo es como pensó que sería.
Era evidente que el referí no se equivocó y sentenció correctamente. Era error. Un error que dejaba vislumbrar otros más pequeños y de esos otros más pequeños.
¿Pero error de él? ¿Error de ellos? ¿De los otros?
¿Cuando faltaba tan poco para el final? ¿A quien enfrentaba ésta vez?
Perdieron. Todos los que cantan victoria antes de tiempo terminan con el corazón en la boca.
Todo y cada uno de nosotros cambió para siempre. El ya no es el mismo. Ella ya no es lo que un día fue. Ellos, los otros,  no volveran a ser lo que antes fueron. Y lo que parece una conjugación de pronombres terminó por escribirse en el memorial eterno, ese que escribimos sin darnos cuenta, ése al que el titulo lo pone un anónimo, y los capítulos los cerramos nosotros, ése que casi siempre queda con un final abierto. Porque siempre quedan cosas por hacer antes de terminar nuestro ciclo.
Que el gato, que el dormitorio, que la pava en el fuego, que la banda, que la juntada del finde, que los amigos de antaño…

Rehacer. Respirar.
Las olas van y vienen, unas más altas, otras no tan altas.
Pero el sintió ahogarse en la más pequeña.
Y si, es joven, pero siente los años sobre sí. Le pesan demasiado.
Pensó que nació viejo para quizás morir joven.
Fue por eso que al bajar la guardia se entregó a la derrota. Ella lo abrazó, no sin decir “yo te lo dije, no eras rival para mi”.

Se durmió mientras sostenía a leve voz “venid, venid si estais cansados venid…Cuán tiernamente…”

 

 

Hola, ávidos y curiosos lectores! ¿Cómo están?

Yo a punto de irme a la iglesia, y subiendo otro capítulo más de la Serie “DEJÁNDOLO TODO” en su primer volúmen “Génesis de un Éxodo”.

El quinto capítulo pareciera salirse de la historia. Pareciera que se tratase de una historia paralela a un policial. Pero enriquece la trama de la historia.

Es corto y con aires de suspenso.

Es fluido.

Es nada más y nada menos que la apertura de una historia que recién empieza a tejerse.

Les dejo que disfruten.

Dios les bendiga!

Su amigo,

Daniel Mondcat

Quote  —  Posted: 24 April, 2013 in Novedades
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Luego de varias días sin subir capitulo, hace unos instantes subí el 4° Capítulo de ésta saga “Dejándolo todo”. Pido mis más sinceras disculpas a los que han seguido con entusiasmo la historia por no haber cumplido con el lapso semanal de subida de capítulos.

Para los que quizás se encuentran por primera vez en éste blog, cabe aclarar que todas las semanas (o casi) intentó postear los capítulos que integran la Saga “Dejándolo Todo”.

Su primer volumen es el que están leyendo ustedes ahora “Génesis de un éxodo”. Ya en la próxima semana pienso subir una entrada dedicada al porque de la elección del nombre, además de otros extras, que serán motivo de sorpresas.

Ahora mientras tanto les dejo disfrutar del cuarto capítulo.

Espero les guste y Dios los bendiga!

Hasta la próxima.

Soportando la prueba

Posted: 1 April, 2013 in Sin categoría

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Amigos, ¡Dios los bendiga!

Ha pasado mucho tiempo desde que publiqué el último artículo y hoy quería sorprenderlo con una observación, una pequeña reflexión sobre los tiempos en que estamos viviendo.

Ha pasado Pascuas. Hay quienes han pasado disfrutando los días libres (feriados) en familia, otros aprovecharon para viajar y ver a seres queridos, otros simplemente se conformaron con dormir todo el dia y no desaprovechar la variedad de huevos de pascuas de la despensa del barrio

Pero hay un porcentaje mínimo en la Tierra, gente que recordó, acaso con dolor y alegría al mismo, a un hombre que cambió el curso de la historia.

Jesús.

Anoche y en alusión a la Pascuas, decidí invitar a los hermanos de la iglesia a casa a ver la famosa y aclamada “Pasión de Cristo”. Hay muchas películas sobre Cristo, decenas de películas.

Pero creo que ninguna ha sido tan aclamada por la crítica internacional como “La Pasión de Cristo” La-Pasion-De-Cristo

Un film que retrata sin filtros el sufrimiento atroz e inhumano, un film que despide algo más que pena y lástima por el dolor de un ser. Un largometraje que nos propone pensar en cada acto que hacemos, el bueno y el malo. Nos hace meditar sobre nuestras conductas humanas.

Está bien. Cristo descendió del cielo, sufrió y murió por nuestros pecados.

Parece algo sencillo, pero no lo es.

Las últimas horas las padeció como hombre.

Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. 

(1 JUAN 1:14)

 

¿Cómo pudo ser, que Él, teniendo la potestad de hacer un gesto y ordenar descender a sus ángeles para barrer a Jerusalén de la Tierra, pudo soportar semejante prueba?

Puedo imaginarme las voces “puedes desistir” “tu eres inocente” “¿de verdad crees que ellos merecen éste sacrificio?” Y el obediente a su propósito, verlo seguir, adelante, con su cruz a cuestas. Todo por amor. Como dice ése alabanza “Como flor que alguien pisoteó, y al caer, pensó en mi, por amor”

 Eso es vencer la prueba.

Muchas veces me jacto de mis victorias.

Pero que hay de las ¿derrotas silenciosas?

Insto a que todos tomemos el ejemplo de nuestro Señor, que en todo momento tuvo su visión fijada en La Palabra.

Una vez escuché de un hermano que predicó una noche “Todo lo que yo sufrí, el lo sufrió antes. El tuvo que padecer todo, desde tentaciones, pruebas, hasta dolores de cabeza, para salir triunfante, erigiéndose como ejemplo hacia nosotros”

El profeta en el mensaje “¿Cómo puedo vencer? El dice que vencer “es soportar la prueba”

(…) “Jesús nos dijo cómo hacerlo. El venció. Significa…“Vencer”, significa “soportar la prueba”, correcto, como los Santos de antaño lo hicieron, como Jesús lo hizo. En medio de todos Sus enemigos, El soportó la prueba. En todo lo que El fue probado, El la soportó. Al encararse con la enfermedad, y El siendo el Mesías, El los sanó. Al encararse con la muerte, El la trajo a vida otra vez. Al encararse con el Calvario, Su propia muerte, El lo venció rindiéndose a Sí mismo. ¿Cómo? Por la Palabra. El dijo: “Destruyan este templo, y Yo lo levantaré en tres días”. La Palabra así lo dijo. ¿Ven? Y al encararse con la muerte El la derrotó; El venció la muerte. Al encararse con el infierno El derrotó al infierno y venció el infierno. Sí. Al encararse con la sepultura El venció la sepultura. ¿Cómo? Todo por medio de la Palabra y humildad. ¡Oh, hermano! Ese es el Hombre verdadero. Ese es el que debe ser su ejemplo. ¿Ven? El derrotó todo, lo venció (…)”.

“¿Cómo puedo vencer? Parr: 103

                                                                                                                                                                                                                                                                                                    William M. Branham

 

Si pudiéramos ver nuestras luchas espirituales en plano sobrenaturales, veríamos huestes malignas batallándonos día y noche.

No son las grandes que no hicimos, sino las pequeñas cosas que dejamos de hacer las que nos ayudaron en nuestra relación con Dios.

Si tomáramos cuidado de las cosas sencillas de todos los días, gestos, modales, actitudes, etc. Si por varios momentos en el día dijéramos “¿qué haría Jesús?” y nos abrazáramos con ternura a su ejemplo, le cederíamos nuestra pelea al Rey de Reyes y las definiciones de nuestras batallas serían distintas. Se los puedo asegurar.

Soporten la prueba, ¡vencedores!

Dios está en ustedes.

(…) Fíjense; vencer. El Dios que está en Ud. es más grande que el que está en él. El dios del mundo no es tan grande como el Dios del Cielo el cual está en Ud (…)”.

“¿Cómo puedo vencer?” Parr: 107

                                                                                                                                  William M. Branham

Ser diferente a la diferencia

Posted: 12 September, 2012 in Pensamientos

¿Podemos ser diferentes a lo que ya es diferente?

Ser diferente

¿Podemos diferenciarnos de lo que ya es diferente?
Joven, tengo que responderte que sí. No porque lo diga yo. Observa lo siguiente:

El mundo está lleno de cristianos, es común encontrarse con alguien y que ésa persona admita creer en Dios, y algunos hasta afirmar amarlo.
¿Realmente creen en Dios? ¿Realmente ellos están amando a Dios?
Mira su vida tan solo.
“El que me ama, mi palabra guardará”  (San Juan 14:23)

“Por sus frutos los conocereís” (San Mateo 7:16)

Una en un millon

Los cristianos de hoy en día son excelentes personas con un criterio moral elevado (varía según quien) y hasta muchas veces con una vida ejemplar. Pero ellos no pasan de ser buenas personas.
Eso casi no llama la atención.
Hay personas que llenan esos requisitos sin creer en Dios siquiera.
Hace falta algo más.
Diferenciarse de lo que ya el mundo conoce como bueno.
Lo “bueno” de éste mundo está muy adulterado. Hay disputas entre pensadores, psicólogos, y filósofos sobre lo que está bien y lo que no. No llegarán nunca a un acuerdo si no se analiza con la Biblia. Serán opiniones y verdades de hombres.
“Sea la palabra de todo hombre mentira, más la mía verdadera” (Romanos 3:04)

Vemos cumplirse la profecía de nuestro Señor “Aún y un poquito, y el mundo no verá más, pero vosotros sí me vereís, porque yo vivo, vosotros también viviréis”. (San Juan 14:19). El mundo no quiere ver al Jesús verdadero, ellos quieren ver al “Jesús ideal de Hollywood”, al “Jesús barbudo y mechón de la guitarra eléctrica”. “El Jesús Hippie”. Nadie propone tampoco mostrarlo tal cual es. No pueden verle porque creen conocer lo que no conocen.

En otras palabras, aun y un poquito y el mundo ya no verá más lo bueno, la luz. Pero ustedes si lo veréis, porque yo vivo y soy luz, vosotros viviréis siendo luz.

La gente quizá necesite ver a alguien que hace más que ir a la iglesia los fines de semana, necesite ver más que alguien que no dice malas palabras, que no tiene mala juntas, que deja su cabello largo.
Todo eso es imitable. El diablo puede imitar todo.
Lo que no puede imitar el enemigo es el amor. Porque Dios es amor.
Por eso, amigo/a, el primer mandamiento (quizás el más difícil) es “amar a Dios por sobre todas las cosas”; luego “amar al hermano” ; porque bien dice Las Santas Escrituras “el que no ama a su hermano, no ha conocido a Dios, pues Dios es amor” (1 Juan 4:8)

¿Cómo demostramos ése amor?

Tiene que ser un sentir dentro del corazón, un anhelo ardiente. Algo que te haga rechazar hasta las cosas que más amás por amor al Señor.
Y, también, por obras que expresen nuestro amor.
De nada serviría decir “Yo amo a Dios” y seguir con mi vida esclavizada de vicios, dogmas, etc.
Él debe ser el primero en nuestras metas, en nuestros anhelos, en nuestros pensamientos.
¿Que hace un enamorado?
Yo he estado enamorado, y puedo decir con firmeza, que uno siente que quiere estar todo el tiempo con “esa personita”; piensa todo el tiempo en el “¿qué estará haciendo ahora?”; trata de sorprender al amor de su vida, de darle obsequios, regalos, etc; nos volvemos lentos, tontos o lo que fuere porque hay algo que está ardiendo dentro nuestro: la llama del amor.
Y uno no puede evitar demostrarlo.

Si lo trasladamos a lo espiritual, la Novia debiera sentir lo mismo por el Novio.
Es tiempo de actuar como enamorados. ¿Enamorados del mensaje? No, de La Palabra de Dios expresada en boca del profeta, enamorados de Jesucristo.
Pensar en él, hablar con él todos los días, cantar de él, depender de él, etc.

Éste es el tiempo de unirnos como hermanos.

No hay dos Novias de Cristo, hay una sola y yo quiero pertenecer a ella. Por eso,  si vos, en algún punto, no estás de acuerdo conmigo, yo no te guardaré rencor. Voy a guardar mi mejor pensamiento y a orar, no para que cambies de parecer, sino para que nuestras diferencias no ahoguen el compañerismo en La Palabra.
El tiempo es oscuro. Ya hemos pasado la medianoche, está cerca el alba, pero aún está oscuro. Hay que resplandecer. No sólo brillar. Resplandecer.

Yo creo que éste es el tiempo en que los jóvenes creyentes de éste precioso Mensaje deben identificarse como cristianos genuinos y dar el “qué hablar” con su vida, con su espíritu, con su verdad, con sus actos. Una vida digna del Evangelio.
Entonces cuando menos pensemos, seremos “los raros”; incluso para los cristianos tibios de hoy en día, seremos diferente a lo que ya era diferente.
¿Estás preparado para el desafío?

97   Él tampoco hacía diferencias. Cuando Heródes llegó allí con la esposa de su hermano Felipe, alguien dijo: “No prediques sobre casamiento y divorcio”. Se le acercó directamente a la cara y le dijo: “No te es lícito tenerla”. ¡Dios, danos hombres que se paren por la verdad! (¡Amén!), sin importar quién esté sentado cerca o quién sea. Que dejen que las astillas caigan donde quieran, y que tracen rectamente el Evangelio. Eso es correcto. Que a lo negro le digan negro, y a lo blanco le digan blanco. A lo bueno bueno, y a lo malo malo. Si Ud. no está bien, entonces corríjase. Eso lo enderezará a Ud., lo hará verse diferente, actuar diferente, vivir diferente, ser diferente. El Espíritu Santo es bueno para Ud. Él lo enderezará a Ud. 

William M. Braham – ¿CREES ÉSTO? 50-0115

Por: Daniel Mondcat